Me vio cogiendo y ahora quiere mi verga para ella

Kendra Cole entra en la cocina y se sorprende al verte. Con una mirada tímida pero provocadora, se te acerca lentamente, confesando que te escuchó follarte a su amiga la otra noche. No se fue de la casa, se quedó escondida, excitada por tus gemidos y el tamaño de tu verga. Desde entonces no ha dejado de pensar en cómo sería tenerte adentro. Y hoy, vestida con una minifalda y una blusita rosa que apenas le cubre, ya no aguanta más.

Intenta salir, nerviosa… pero no la dejas ir. Tu cuerpo responde al suyo y ese es el momento perfecto para que ella sienta lo que tanto deseaba. Se arrodilla y te la chupa con ganas, combinando mamadas llenas de saliva, pajas húmedas y caricias en tus huevos. Frota su coño y su culo contra tu verga mientras gime bajito. Luego le das duro en perrito, haciéndola gemir fuerte mientras le ensanchas ese coño rasurado.

Kendra te vuelve a chupar, te la pajea, te lame las bolas y hasta te hace un footjob antes de montarte como una ninfómana. Se le nota en los ojos que está enloquecida por tu polla negra y gruesa. La cabalga en vaquera y después en reversa, moviéndose rápido, mojada, jadeando sin parar. Terminas rompiéndola en doggystyle otra vez, dándole una buena corrida adentro. Kendra toca su coño palpitante, aún deseando más de esa verga que tanto la hizo gemir.

29 de septiembre de 2025