Le ofrecí dinero y acabó mamándola y pidiendo más

Malia Lenoir, una turista francesa de curvas intensas y mirada ardiente, no esperaba que su paseo nocturno terminara en una follada de casting. Bastó una charla rápida y algo de dinero para que esta belleza europea se animara a mostrar sus tetas grandes y carnosas, dejándose tocar sin pudor. Caliente como estaba, no dudó en bajarse a chuparla con hambre. Después del mamazo, Malia abrió las piernas en el suelo, pidiendo una buena follada en misionero. La cosa subió de nivel cuando se montó sobre la verga mojada, meneando el coño mientras le frotaban el clítoris. Luego se puso en cuatro y recibió una buena dosis de polla y azotes, hasta acabar con la boca llena de leche, suplicando por más.

16 de julio de 2025